Isaac recibe la estafeta de Abraham |
- ¿Por qué han venido aquí? —preguntó Isaac—. Es evidente que ustedes me
odian, ya que me echaron de su tierra.
- Podemos ver claramente que El Señor está contigo —respondieron ellos—.
odian, ya que me echaron de su tierra.
- Podemos ver claramente que El Señor está contigo —respondieron ellos—.
Continuando la promesa |
Este capítulo parece una copia de capítulos anteriores, donde Abraham por temor a morir, no
reveló que Sara era su esposa, en dos ocasiones, una en Egipto, y otra, justamente en esta tierra con el rey Abimelec. Aquí Isaac sigue los pasos de su padre Abraham, en la misma situación, es por eso, que debemos ser tan cuidadosos con nuestro ejemplo y legado, ya que será de una gran influencia para nuestros hijos, para bien, o para mal. Sin embargo, una vez más como en el caso de Abraham, la fidelidad y protección de nuestro Dios, va más allá de nuestros temores y falta de confianza, Dios inclina el corazón de los reyes, y gobernantes, hacia donde él quiere, y por supuesto, que siempre a favor de los planes eternos de sus elegidos. Proverbios 21:1 dice lo siguiente: “El corazón del rey es como un arroyo dirigido por el SEÑOR, quien lo guía por donde él quiere”. Al igual que en el caso de su papá, cada aparente adversidad que Isaac enfrenta resulta en mayor prosperidad y bendición, tal como está escrito: Romanos 8:28 “Y sabemos que Dios hace que todas las cosas cooperen para el bien de los que lo aman y son llamados según el propósito que él tiene para ellos”. |
De los tres patriarcas: Abraham, Isaac, y Yacob, Isaac es de quien menos se habla en todo el libro de Génesis, sin embargo, lo poco que se escribió de él, es suficiente para comprender su
paralelismo con Yeshúa, el hijo de la promesa, a quien Isaac representa. Cualidad de Isaac: Mansedumbre y humildad. 1. En mansedumbre y humildad, soportó los abusos y burlas de Ismael, ya que no se menciona que haya contestado o se haya vengado. 2. En mansedumbre y humildad, dejó que su papá le atara las manos para sacrificarlo. 3. En mansedumbre y humildad, recibió la esposa que su papá le eligió sin objeciones. 4. En mansedumbre y humildad, reconoció su temor y cobardía, cuando Abimelec le reprendió por haber mentido. |
5. En mansedumbre y humildad, reaccionó cuando le quitaron los pozos que había cavado, sin pelear por ellos. 6. En mansedumbre y humildad, sin pelear, se fue de la tierra de Abimelec cuando lo expulsaron. 7. En mansedumbre y humildad, hizo pacto y le hizo banquete a los enemigos que lo expulsaron de su tierra. 8. En mansedumbre y humildad, soportó el menosprecio de su hijo Esaú y siguió amándole. ¿Su mansedumbre y humildad nos recuerda a alguien? Sin duda, al hijo de la promesa. |
Isaías 42:1-4 dice lo siguiente:
“Miren a mi siervo, al que yo fortalezco; él es mi elegido, quien me complace. He puesto mi Espíritu sobre él; él hará justicia a las naciones. No gritará, ni levantará su voz en público. No aplastará a la caña más débil, ni apagará una vela que titila. Les hará justicia a todos los agraviados. No vacilará ni se desalentará hasta que prevalezca la justicia en toda la tierra. Aun las tierras lejanas más allá del mar esperarán sus instrucciones”. Mateo 5:5 “Dios bendice a los que son humildes, porque heredarán toda la tierra”. Y, 1 Pedro 2:19-23 “Pues Dios se complace en ustedes cuando hacen lo que saben que es correcto y sufren con paciencia cuando reciben un trato injusto. Es obvio que no hay mérito en ser paciente si a uno lo golpean por haber actuado mal, pero si sufren por hacer el bien y lo soportan con paciencia, Dios se agrada de ustedes. Pues Dios los llamó a hacer lo bueno, aunque eso signifique que tengan que sufrir, tal como Cristo sufrió por ustedes. Él es su ejemplo, y deben seguir sus pasos. Él nunca pecó y jamás engañó a nadie. No respondía cuando lo insultaban ni amenazaba con vengarse cuando sufría. Dejaba su causa en manos de Dios, quien siempre juzga con justicia”. |
Oración:
La oración que haremos, es una oración famosa llamada: El Magnificat, que es la que María, o Miriam, la mamá de Yeshúa, hizo como fruto de gratitud, por haber sido elegida para dar a luz al hijo de la promesa, aquel a quien Isaac representa. Lucas 1:46-55 “María respondió: —Oh, cuánto alaba mi alma al Señor. ¡Cuánto mi espíritu se alegra en Dios mi Salvador! Pues se fijó en su humilde sierva, y de ahora en adelante todas las generaciones me llamarán bendita. Pues el Todopoderoso es santo y ha hecho grandes cosas por mí. |
El muestra misericordia de generación en generación a todos los que le temen. ¡Su brazo poderoso ha hecho cosas tremendas! Dispersó a los orgullosos y a los altaneros.
A príncipes derrocó de sus tronos y exaltó a los humildes. Al hambriento llenó de cosas buenas y a los ricos despidió con las manos vacías. Ayudó a su siervo Israel y no se olvidó de ser misericordioso. Pues lo prometió a nuestros antepasados, a Abraham y a sus descendientes para siempre”. Amén. Esto es: Simplemente Descubre la Biblia simple. Les espero en el próximo capítulo |