Isaac pasa la estafeta a su hijo Yacov |
¡El olor de mi hijo es como el olor del campo, que el SEÑOR ha bendecido!
Del rocío de los cielos y la riqueza de la tierra, que Dios te conceda siempre
abundantes cosechas de grano y vino nuevo en cantidad.
Que muchas naciones sean tus servidoras y se inclinen ante ti. Que seas el amo
de tus hermanos, y que los hijos de tu madre se inclinen ante ti. Todos los que te
maldigan serán malditos, y todos los que te bendigan serán bendecidos.
Del rocío de los cielos y la riqueza de la tierra, que Dios te conceda siempre
abundantes cosechas de grano y vino nuevo en cantidad.
Que muchas naciones sean tus servidoras y se inclinen ante ti. Que seas el amo
de tus hermanos, y que los hijos de tu madre se inclinen ante ti. Todos los que te
maldigan serán malditos, y todos los que te bendigan serán bendecidos.
Destinado para bendición |
Leamos Romanos 9:9-13
“…pues Dios había prometido: Volveré dentro de un año, y Sara tendrá un hijo. Ese hijo fue nuestro antepasado Isaac. Cuando se casó con Rebeca, ella dio a luz mellizos. Sin embargo, antes de que nacieran, antes de que pudieran hacer algo bueno o malo, ella recibió un mensaje de Dios. (Este mensaje demuestra que Dios elige a la gente según sus propósitos; él llama a las personas, pero no según las buenas o malas acciones que hayan hecho). Se le dijo: Tu hijo mayor servirá a tu hijo menor. Como dicen las Escrituras: "Amé a Jacob, pero rechacé a Esaú”. |
Si Dios, desde antes del nacimiento de Yacov y Esaú, ya había determinado que Yacov recibiría la primogenitura, y por consiguiente la bendición para recibir las promesas dada a Abraham, y todo el plan para salvar al mundo, ¿por qué toda esta historia de engaños, de suplantación de identidad, y de parte de Isaac la intención de bendecir al hijo equivocado? Por la misma razón que encontraremos en la Biblia, una y otra vez, como el gran creado de universo, como un gran maestro de ajedrez, logra siempre ganar, no importa que piezas se muevan. Dios, pudo haber creado robots, que hicieran exactamente lo que él decía, sin ninguna falla, ni cambio de planes, ni estrategias alternas.
Pero, en lugar de eso, crió hijos, sabios en su propia opinión, siempre adolescentes, siempre rebeldes. |
Leamos lo que dice: Isaías 1:2-5
“¡Escuchen, oh cielos! ¡Presta atención, oh tierra! Esto dice el SEÑOR: Los hijos que crié y cuidé se han rebelado contra mí. Hasta un buey conoce a su dueño, y un burro reconoce los cuidados de su amo, pero Israel no conoce a su amo. Mi pueblo no reconoce mis cuidados a su favor. ¡Qué nación tan pecadora, pueblo cargado con el peso de su culpa! Está lleno de gente malvada, hijos corruptos que han rechazado al SEÑOR. Han despreciado al Santo de Israel y le han dado la espalda. ¿Por qué buscar más castigo? ¿Se rebelarán para siempre? Tienen la cabeza herida y el corazón angustiado”. |
Pero, justamente en esto consiste su grandeza, y lo que nos inspira a adorarle.
Llevamos hasta el momento 27 capítulos de historias de fallas humanas, desobediencia a la palabra de Dios, falta de confianza en sus promesas, falta de paciencia, falta de fidelidad a sus instrucciones, y aun así, Dios usando esas mismas circunstancias para cumplir sus propósitos eternos. Adán y Eva y sus descendientes pecaron, pero Noé y su familia continuaron la historia de esperanza humana. Noé después de haber sido salvado del diluvio se embriagó, y terminó maldiciendo a uno de sus nietos, y el resto de su descendencia terminó construyendo la Torre de Babel, pero de allí, Dios comenzaría de nuevo llamando a la familia de Abraham. |
Abraham y Sara trataron de ayudar a Dios, apresurándose a tener un hijo con la esclava egipcia, con consecuencias que hasta la actualidad continúan, pero, aun así, Dios promete que bendeciría a un remanente de esta descendencia. Isaac, Rebeca, en lugar de simplemente seguir la instrucción de pasarle la estafeta a su hijo Jacob, desarrollan esta historia alterna, o plan “b”, de banquete para bendecir a Esaú, suplantación de identidad, etc., que les traería tristes consecuencias, como el odio entre hermanos, despedida de Jacob, para no volver a verlo, etc. Pero, aun así, Dios cumpliría su palabra. |
Por qué somos tan complicados los hijos de Dios? ¿Por qué no simplemente obedecer las instrucciones
divinas al pie de la letra, esperar pacientemente en sus promesas, y dejar de ayudarle, de inventar estrategias para cumplir lo que Él ya había dicho de antemano? Porque, eso es justo lo que nos hace humanos, eso es justo lo que hace que le adoremos, y que cada vez que a pesar de nuestros errores e impaciencias, Él sigue cumpliendo su palabra, reconozcamos cuan pequeños somos, y cuan grande es la compasión de nuestro Padre celestial. Oración: Salmo 103 Salmo de David. “Que todo lo que soy alabe al SEÑOR; con todo el corazón alabaré su santo nombre. Que todo lo que soy alabe al SEÑOR; que nunca olvide todas las cosas buenas que hace por mí. Él perdona todos mis pecados y sana todas mis enfermedades. Me redime de la muerte y me corona de amor y tiernas misericordias. Colma mi vida de cosas buenas; ¡mi juventud se renueva como la del águila! El SEÑOR da rectitud y hace justicia a los que son tratados injustamente. Dio a conocer su carácter a Moisés y sus obras al pueblo de Israel. El SEÑOR es compasivo y misericordioso, lento para enojarse y está lleno de amor inagotable. |
No nos reprenderá todo el tiempo, ni seguirá enojado para siempre. No nos castiga por todos nuestros pecados; no nos trata con la severidad que merecemos.
Pues su amor inagotable hacia los que le temen es tan inmenso como la altura de los cielos sobre la tierra. Llevó nuestros pecados tan lejos de nosotros como está el oriente del occidente. El SEÑOR es como un padre con sus hijos, tierno y compasivo con los que le temen. Pues él sabe lo débiles que somos; se acuerda de que somos tan sólo polvo. Nuestros días sobre la tierra son como la hierba; igual que las flores silvestres, florecemos y morimos. El viento sopla, y desaparecemos como si nunca hubiéramos estado aquí. Pero el amor del SEÑOR permanece para siempre con los que le temen. ¡Su salvación se extiende a los hijos de los hijos de los que son fieles a su pacto, de los que obedecen sus mandamientos! El SEÑOR ha hecho de los cielos su trono, desde allí gobierna todo. Alaben al SEÑOR, ustedes los ángeles, ustedes los poderosos que llevan a cabo sus planes, que están atentos a cada uno de sus mandatos. ¡Sí, alaben al SEÑOR, ejércitos de ángeles que le sirven y hacen su voluntad! Alabe al SEÑOR todo lo que él ha creado, todo lo que hay en su reino. Que todo lo que soy, alabe al SEÑOR”. Amén. Esto es: Simplemente Descubre la Biblia simple. Les espero en el próximo capítulo. |