Descendencia de Esaú. |
“Este es el relato de los descendientes de Esaú (también conocido como Edom).
Esaú: La semilla de Amalec |
Este capítulo es una especie de paréntsis, entre la historia de Jacob, que continuará con su hijo Yosef,
heredero de las promesas hechas a Abraham e Isaac. En este capítulo paréntesis, queda registrada la historia de la descendencia de Esaú, sus esposas de la descendencia de Canaán e Ismael, lo cual entristeció mucho a sus padres, y también, detalles de incesto e inmoralidad dentro de este árbol genealógico, que contiene también la semilla de Amalec, un archienemigo de Israel en el futuro, y hasta la última generación, según la profecía de Moisés. Leamos: Éxodo 17:16 “Dijo: Por cuanto han levantado su puño contra el trono del SEÑOR, ahora el SEÑOR estará en guerra con Amalec de generación en generación”. |
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Según la tradición judía, este capítulo, fue registrado aquí por las siguientes razones: 1.- Para dejar un registro de los nombres de los descendientes de Esaú, y las tierras que ocupaban, ya que Israel en su salida de Egipto, pasaría por estas tierras, y Dios no les permitiría invadirlas. 2.- Para dejar un testimonio contra Esaú, de su mezcla con naciones extranjeras e idólatras, lo cual, causaría su futuro juicio, detallado explícitamente por el profeta Abdías. |
3.- Para dejar testimonio de que Esaú se fue de la tierra prometida de Abraham, y que el único heredero legítimo es Jacob. Cuenta también la tradición judía, que después de la muerte de Isaac, Jacob le propuso a Esaú para dividirse la herencia, que Esaú se quedara con todo, lo cual era muchísimo, y que sólo le dejara la tierra de Canaán, y la cueva de Macpela, de sepultura de los abuelos, así que Esaú aceptó de inmediato, y por eso, se fue a vivir a esas montañas conocidas como Edom, actualmente territorio de Jordania, del otro lado del río Jordán. De modo que Jacob, anheló el legado y herencia espiritual de sus padres, mientras que Esaú deseó el dinero y la vida loca con extranjeras
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Moraleja de este capítulo: No vale la pena decir muchas palabras para promover o agrandar la memoria de Esaú, tal como Moisés hizo, le dedica un capítulo paréntesis, como testimonio de su juicio, e inmediatamente después, continúa con la más maravillosa historia de los sueños de Yosef, con la cual, se puede descubrir el mensaje de salvación de la Biblia, para todas las naciones. |
Basta decir para cerrar este capítulo lo siguiente:
Romanos 9:13 “Como dicen las Escrituras: Amé a Jacob, pero rechacé a Esaú”. 1Pedro 1:23-25 “Pues han nacido de nuevo, pero no a una vida que pronto se acabará. Su nueva vida durará para siempre porque proviene de la eterna y viviente palabra de Dios. Como dicen las Escrituras: Los seres humanos son como la hierba, su belleza es como la flor del campo. La hierba se seca, y la flor se marchita. Pero la palabra del Señor permanece para siempre. Y esta palabra es el mensaje de la Buena Noticia que se les ha predicado”. |
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Y, Hebreos 12:16-17 dice lo siguiente:
“Asegúrense de que ninguno sea inmoral ni profano como Esaú, que cambió sus derechos de primer hijo varón por un simple plato de comida. Ustedes saben que después, cuando quiso recibir la bendición de su padre, fue rechazado. Ya era demasiado tarde para arrepentirse, a pesar de que suplicó con lágrimas amargas”. Oremos: Padre nuestro, Dios de Abraham, Isaac, y Jacob, te agradecemos, porque el solo hecho, de que nos estés mostrando estas historias, es porque nos has elegido para seguir el legado de Jacob, y despreciar el legado de Esaú. Los cielos y la tierra pasarán, pero tus palabras nunca pasarán. Nada se puede comparar con la herencia eterna, que tienes para nosotros, y te rogamos, que abras nuestros ojos, y los de nuestros hijos, cada vez más, para descubrirla. En el nombre de nuestro Salvador Yeshúa, la estrella de Yacov. Amén. Esto es: Simplemente Descubre la Biblia simple. Les espero en el próximo capítulo. |